lunes, 18 de octubre de 2010

Sobre ofrecer a los demás cuando pruebas algo nuevo

No es que no lo soporte, pero no me gusta especialmente que, cuando alguien prueba un plato, una bebida o un postre por primera vez, me ofrezca por sistema degustarlo:

- Pruébalo, ¡está riquísimo!

- No, muchas gracias... es que no me gusta.

- ¡Pero si no lo has probado! ¡Anda, prueba, prueba, no sabes lo que te pierdes!

- Muchas gracias... si es que...

- ¡Prueba, prueba!

Es como una violación.

Lo peor de todo no es la parte violenta, esa intención de invadir el terreno de los demás. Lo que más me inquieta es el conjunto de dudosas motivaciones para llevar a cabo este tipo de estratagemas. ¿Por qué se nos ofrece con tanta ansia algo que supuestamente está tan rico? ¿Hay platos que saben tan bien como para donarlos a los demás, en una especie de sacrificio solidario? ¿Es posible que eso lo llegue a querer hacer un ser humano?

Por ahora, no he sido capaz de encontrar una razón que destaque sobre las otras; más bien parece que se trata de una dinámica un poco difícil de parar una vez que se inicia: ofreces probar al otro lo tuyo y el otro te responde con lo suyo. El siguiente paso no es otro que disparar contra aquel que nada tenía contra los demás y que simplemente se había limitado a mirar hacia su propio plato.

Quizá la mejor salida en este, como en otros muchos casos, sea la violencia. Lanzarse a la yugular del comercial de yogur con hebras de bacon y recordarle lo que más le duele: su miedo a la oscuridad, por ejemplo. O bien hacer como que se prueba el helado de aceituna, para a continuación estrellárselo en los morros a tu opresor potencial.

Quizá, en un primer momento, estas actitudes no se entiendan, pero la evidencia empírica nos indica que el índice de ofertas de platos nuevos -y viejos, e invitaciones y saludos- decrece de forma directamente proporcional a la barrabasada que se haya cometido como respuesta. Son solo algunos consejos para afrontar mejor la vida en comunidad. No es bueno tomarse nada al pie de la letra.

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