lunes, 27 de julio de 2009

Políticos

No saben hablar en público, no entienden de Economía; apenas han hecho carrera antes de llegar a sus puestos; carecen de conocimiento sobre los ministerios que ocupan; son inoportunos, torpes, obstinados, mentirosos, hipócritas. Y, lo peor de todo, son mediocres.

En este país, lamentablemente, solo tenemos políticos mediocres.

De ahí que se haya lanzado una especie de acuerdo de competencia por lo bajo, un nuevo pacto canovista por el que regirá ocho años un partido y ocho el otro.

Un acuerdo no para gobernar, ni siquiera para gestionar. Un chanchullo para ocupar la poltrona, el escenario: un circo que no nos lleva a ningún sitio pero que cuesta mucho dinero.

¿Es entonces el momento de entrar en política? Quizá sea el peor de todos. Y es que se matan por estos puestos.

5 comentarios:

Javi Alonso dijo...

Es curioso, si hace unos años me dicen que tú y yo íbamos a estar tan de acuerdo en asuntos políticos, no te voy a decir que no me lo hubiera creído, pero sí, al menos, que me habría sorprendido. En cualquier caso lo que me hace escribirte este comentario no es esa circunstancia, sino una mucho más extrema, y es que estás también de acuerdo con... ¡JOSÉ MARÍA GARCÍA! jajaja, no sé, me ha hecho gracia la coincidencia de opiniones.

Un abrazo

Edelmino Pagüero dijo...

Jajajja. Supongo que todo el mundo se lo calla porque es un peligro caer en el populismo. Pero bah, es un blog y la máxima libertad de expresión me permite estas licencias.

Obviamente, la salvación vendrá de la izquierda...

Ezequiel dijo...

No sé quien dijo el otro día que más que políticos tenemos tecnócratas al servicio de su partido.

No creo que exista a estas alturas de la película la Derecha y la Izquierda clásicas.

Acaso ZP es socialista, Espe liberal y Alberto centrista. Son tecnócratas pragmáticos, que si bien siguen una dirección, no les duelen prendas en hacer guiños a contranatura para "caer" bien a la mayoría de la población, y seguir en el poder.

Edelmino Pagüero dijo...

Bueno, muchos decimos también que a los políticos los creamos nosotros: los votamos y fomentamos la sociedad en la que se forman.

Quizá la sociedad menos conformista pre años ochenta fomentó unos políticos con más nivel. Ahora tenemos a las segundas o terceras filas, por supuesto, después del primer segunda fila que hubo que fue José María Aznar. Aunque él no se haya enterado todavía.

Javier Alonso dijo...

Tal y como está el panorama, el presente y sobre todo el futuro, venga de donde venga la salvación será bien recibida.